Translate

sábado, 10 de diciembre de 2011

Camino de Santiago, 6ª etapa




Hoy estoy muy contenta, por fin voy a ir acompañada. Mi amiga y compañera María Serrano se anima a venirse conmigo.
Mi cuñado Manolo nos lleva a Segura de León. Nos vamos a las 9, para hacer la ruta tempranito. El día está bueno. Cuando llegamos hay algo de niebla, pero le da un encanto especial a toda la ruta.



El camino es precioso. Transcurre la mayoría del tiempo entre encinas, que están envueltas por la niebla. Nos hacemos fotos y salen geniales. Bueno al menos a mí me lo parecen.



Hoy la ruta es más larga que otros días, sobre 12kms, pero la mayoría del tiempo es bajando o llano, y por eso he animado a María para que se venga, porque sé que ella puede hacerlo.

Pasamos nuestra primera agonía a los 4kms. No sabemos muy bien si hemos cogido el camino adecuado. No hay señal y vamos subiendo. No me atrevo a decir nada, para no desanimar. Yo mismo voy notando el desánimo en mis piernas. Me cuesta mucho dar una zancada. Pero sigo sin comentarle nada a María. No puedo ni pensar estar subiendo equivocadamente. esta idea me va hundiendo, y no quiero dar muestra de mucha preocupación, pero tenemos que comprobar primero que no nos hemos equivocado.

Más adelante, cuando ya hemos subido bastantes metros, por fin nos encontramos la flecha amarilla que nos indica la dirección del Camino de Santiago, y nos certifica que vamos bien. ¡qué alegría dan verlas en el camino!

Nos encontramos con un hombre que primero se nos queda mirando y después nos pregunta si vamos a la dehesa. Nos hace gracia, por su particular tonillo. Ese que tienen los extremeños del sur. María ni se entera de qué ha dicho, piensa que es portugués. Y nos hace reir. Eso nos hace olvidar el mal rato que habíamos pasado unos kilómetros antes, y seguimos animadas sin parar de correr.



En un tramo de algunos metros hay una subida con muchas piedras sueltas. Mi cuñado ya me había avisado, y hay un momento que preferimos dar unos pasos andando. ¡Qué Santiago nos perdone!

El sendero se estrecha y vamos recorriendo una calzada, parece romana, pero creo que es más bien del terreno propio del lugar. Muy pedregoso. De hecho los campos tienen unas piedras enormes. Parece el pais de los picapiedras. Unos días después me vengo a enterar que por esos campos se grabaron algunos episodios de Curro Jiménez.


Ya vemos la vía del tren, la que va de Zafra a Huelva. Nos da alegría, mucha, porque sabemos que la meta de hoy está muy próxima a ella. Nos paramos a hacernos algunas fotos.

A los pocos metros, ya vemos a mi cuñado que lleva un buen rato esperándonos en su coche.

Gracias a los dos por acompañarme en mi sexta etapa.

No hay comentarios:

Publicar un comentario